El marketing tradicional es conocido por sus métodos de invasión y competitividad agresiva. Sin embargo, ¿te imaginas una campaña de marketing que no disguste y moleste a tus prospectos y clientes?
La ilusión inicial.
A todos nos ha pasado. Descubrimos una marca que se ve interesante y decidimos darle una oportunidad. ¿Qué hacemos entonces? Efectuamos nuestra primera compra desde su tienda en línea, mientras nuestras expectativas apuntan a que recibiremos un producto que nos cautivará.
No obstante, durante el proceso de compra, nos encontramos con un pequeño obstáculo: para poder completar la transacción de nuestro pedido, debemos ingresar nuestro correo electrónico. No hay ninguna opción para comprar como “huésped” y, entonces, nos vemos sumergidos en la necesidad de crear una cuenta.
La decisión de compra.
Hasta aquí, no todo va mal. A pesar de que este proceso requiere más de nuestro tiempo y muchos consumidores podrán optar por abandonar el sitio; aquellos que verdaderamente desean realizar la compra, no tendrán problema en proporcionar su correo electrónico.
Los días pasan y recibes tu pedido. El producto que adquiriste te gusta y sientes que la compra valió la pena. Sin embargo, algo ha cambiado: comienzas a recibir toda clase de correos electrónicos de dicha marca en tu bandeja de entrada. Entonces, piensas: ¿en qué momento me suscribí a su newsletter?
La invasión.
Es así como la invasión publicitaria de esta marca comienza. Te sientes invadido, bombardeado y molesto. Después de todo, tú sólo querías comprar un producto, NO recibir información extra para que puedan venderte más de estos. La marca que parecía agradarte, termina por disgustarte. Y, ¿por qué no?, después de todo te están forzando a recibir marketing y publicidad que tú no deseas.
Contrariamente a estos métodos, existe el marketing gentil, el cual reconoce que, a pesar de que existe una gran competencia en la mayoría de las industrias, aquellos negocios y marcas que logren servir mejor a los consumidores, serán las triunfantes.
Marketing amable.
Ahora que sabes de la existencia del marketing gentil, ¿entiendes de qué trata realmente? Pues bien, este tipo de estrategias se enfocan principalmente en ponerse en los zapatos de tu cliente ideal. Esto, con el fin de profundizar en sus mayores necesidades, preocupaciones y problemas, antes de pensar en venderles cualquier producto o servicio.
Asimismo, este marketing, fomenta la difusión de información relevante, habilidades y generosidad, a clientes y prospectos por igual. De tal forma, que logres encaminar a tus clientes potenciales con gentileza y amabilidad hacia la experiencia que ofreces, en lugar de concentrarte en efectuar la venta únicamente.
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