El contenido se ha convertido en la fuente de vida del marketing actual. Sin embargo, para que éste cumpla con su cometido, es sumamente necesario confeccionar y distribuir un buen mensaje que sea capaz de mostrar la esencia de un negocio.
La pregunta que deberás hacerte.
A la hora de crear un mensaje, la incertidumbre puede convertirse en tu peor enemigo. Diversas preguntas llegarán a tu mente y la inundarán de dudas. ¿Acaso mi mensaje es lo suficientemente bueno? ¿Mi audiencia lo entenderá? ¿Está representando los valores de mi negocio?
Esta inquietud puede afectar la efectividad de tu mensaje, así como del resto de tu campaña de marketing. Pese a esto, en realidad, sólo hay una pregunta que deberás plantearte para crear ese mensaje que será memorable: ¿Por qué es importante lo que quiero decir?
Te entiendo, pensarás que es una pregunta bastante obvia. Sin embargo, es esta obviedad, la que te forzará a ir avanzando más profundamente, paso a paso. Cuando hayas descubierto la importancia de tu mensaje, entonces lograrás conocer aquello que verdaderamente motiva a tu público meta.
Poniendo el ejemplo.
Para que esta idea se te haga más sencilla de entender, te pondré un ejemplo. Aquí va:
Imagina que tu negocio se dedica a la venta de productos para mascotas. Entonces yo te pregunto, ¿por qué es importante vender productos para mascotas?, (aquí estamos partiendo de lo obvio).
Tú me responderías algo así como: “Nuestros productos facilitan varias tareas y responsabilidades de los dueños, además de que contribuyen a entretener y a cuidar de sus mascotas.”
Nuevamente te pregunto, ¿por qué es eso importante?
Y tú me dirías: “Facilitar las responsabilidades de los dueños hace la convivencia con las mascotas más agradable. Adicionalmente, el cuidado necesario favorece la salud de las mascotas.”
Y aquí vamos otra vez. Y, eso es importante… ¿por qué?
Así que tú lo piensas profundamente y respondes: “Si las mascotas están sanas, entonces estarán felices. Y los dueños que disfrutan de sus mascotas, también lo estarán. Cuando hay un balance entre diversión y responsabilidades, hay armonía y felicidad.
El resultado.
Entonces, ¿cuál es la forma de despertar las emociones de tu audiencia? Pues bien, con el resultado: un mensaje que resume y simplifica el propósito de tus productos: “Mascotas felices, dueños felices.”
Si bien, esta actividad puede darte grandes resultados. Simplemente, asegúrate de no detenerte, sino hasta que hayas conseguido las necesidades humanas esenciales, como felicidad, seguridad o tranquilidad o, por ejemplo, el deseo de alcanzar control, amor e, inclusive, poder.
Cuando tus productos o servicios cumplen con una de estas necesidades básicas, sin duda alguna, tu audiencia responderá positivamente a tu mensaje.
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