Al hablar de “compatibilidad” nos referimos a la afinidad que debe existir entre navegadores para mostrar el contenido de una página Web. Este es un tema que involucra diferentes intereses, pero que se enfoca principalmente en dos factores que cada vez tienen un valor más crítico para la sociedad actual: tiempo y dinero.
Importancia de la compatibilidad Web.
¿Has notado que en ocasiones, al abrir una página Web, ésta tarda demasiado en cargarse o sencillamente no se abre de manera correcta? Esto puede deberse a diferentes causas, pero la incorporación de elementos y propiedades de difícil procesamiento para algunos navegadores es un factor primordial a considerar.
Programación y Navegación Web.
Para conocer un poco mejor la importancia de la compatibilidad de navegadores Web, debemos considerar dos puntos esenciales: los navegadores y los lenguajes de programación Web.
Actualmente existe una gran cantidad de navegadores Web, que se han ido desarrollando y actualizando conforme a las necesidades de navegación del usuario y, por lo mismo, cada usuario se sentirá más cómodo trabajando en uno que en otro. Dentro de los más populares se encuentran:
- Chrome
- Firefox
- Opera
- Internet Explorer
- Safari
Por otro lado, debemos considerar también la gran diversidad de lenguajes de programación que se utilizan hoy en día. Por mencionar sólo algunos:
- JavaScript
- Python
- .Net
- Ruby
- HTML5
Tomando en cuenta estos dos puntos, es de gran importancia considerar la funcionalidad de los diferentes lenguajes de programación actualmente en uso dentro de los navegadores más populares, ya que cada uno de estos deberá configurarse para optimizar su funcionamiento en de cada navegador.
Un punto clave respecto a la compatibilidad de navegadores es identificar posibles conflictos y hacer que la página Web no pierda calidad, esto sin olvidar la utilidad para el usuario y sus hábitos de navegación. No olvides tener en mente todo el tiempo el alto costo potencial del tiempo hoy en día. El usuario de tu sitio Web en verdad valorará estos “pequeños” detalles.
Ahorra tiempo y dinero
Puede parecer que un sitio responsive es mucho más costoso de desarrollar, pero en realidad es todo lo contrario. Una página con esta tecnología te libera de la necesidad de contar con una versión de escritorio y una móvil y, lo que es más importante, reduce sustancialmente los costos y el tiempo dedicado al mantenimiento del mismo. Esto se resume en más recursos disponibles para dedicarte a lo que realmente te apasiona.
